lunes, 4 febrero, 2019

Día mundial contra el cáncer


El control del cáncer a nuestro alcance

Cada 4 de febrero se realizan en todo el mundo acciones de concientización sobre el cáncer para reducir el número de muertes evitables, dando a conocer y difundiendo cuáles son las acciones que deben encararse para reducir la mortalidad por esta enfermedad.

¿Qué es el cáncer?

Se trata de un grupo de enfermedades que pueden afectar a cualquier parte del cuerpo. Las células normales se dividen de manera ordenada, mueren cuando se han desgastado o se dañan y nuevas células toman su lugar. El cáncer se origina cuando las células comienzan a multiplicarse sin control y desplazan a las células normales, formando un tumor canceroso. Las células cancerosas también se pueden propagar a otras partes del cuerpo; es lo que se denomina metástasis.

No todo tumor es canceroso. En los tumores benignos, no cancerosos, las células que los forman no se expanden a otras partes del cuerpo, lo que permite extirparlos y, en la mayoría de los casos, no vuelven a generarse. En los tumores malignos, o cancerosos, las células que los forman se comportan de manera anormal, se dividen sin control u orden, pueden invadir y destruir el tejido que se encuentra a su alrededor y/o ingresar al torrente sanguíneo o al sistema linfático.

Muchas veces es posible detectar los tumores cancerosos de forma temprana y tratarlos.

Factores de riesgo que inciden sobre el cáncer

Un gran porcentaje de las enfermedades no transmisibles son prevenibles y comparten los mismos factores de riesgo. Se estima que los cinco principales riesgos para la salud están relacionados con el comportamiento y la alimentación: índice alto de masa corporal, bajo consumo de frutas y hortalizas, inactividad física, consumo de tabaco e ingesta excesiva de alcohol. El riesgo de cáncer aumenta con la edad. Pero el consumo de tabaco es el factor de riesgo más importante: causa el 22% de las muertes mundiales por cáncer en general y el 71% de los fallecimientos por cáncer de pulmón. Los cánceres causados por infecciones víricas, como los virus de las Hepatitis B y C o por el Virus Papiloma Humano (VPH), son responsables de hasta un 20% de las muertes por cáncer en los países de ingresos bajos y medios.

Los principales factores de riesgo tienen un gran impacto sobre la carga de cáncer global:

El tabaco, a través de sus diversas formas de exposición, constituye la principal causa de muerte relacionada con el cáncer en todo el mundo entre los hombres y cada vez más entre las mujeres. Las formas de exposición incluyen tabaquismo activo, respirar humo de segunda mano (tabaquismo pasivo o involuntario) y tabaco sin humo (como mascar tabaco). El tabaco provoca diversas formas de cáncer: de pulmón, esófago, laringe, boca, vejiga, riñón, estómago, cuello de útero, colon y recto.

El sobrepeso y la obesidad están asociados causalmente a varios tipos de cáncer, como de esófago, colorrectal, mama en mujeres postmenopáusicas, endometrio y riñón.

La inactividad física contribuye de forma importante al aumento de las tasas de sobrepeso y obesidad en muchas partes del mundo y de forma individual aumenta el riesgo de algunos cánceres.

El consumo excesivo de alcohol es un factor de riesgo de muchos tipos de cáncer, incluido el de la cavidad bucal, faringe, laringe, esófago, hígado, colorrectal y mama. El riesgo para varios tipos de cáncer (por ejemplo, de cavidad oral, faringe, laringe y esófago) derivado de un alto consumo de alcohol aumenta sustancialmente si la persona también fuma en gran cantidad.

La infección con el virus de la Hepatitis B provoca alrededor del 52% de los carcinomas hepatocelulares del mundo. Otro 20% de cánceres hepatocelulares lo provoca la infección del virus de la Hepatitis C.

El Virus del Papiloma Humano (VPH) es la infección viral del tracto reproductivo por transmisión sexual más común del mundo e infecta a 660 millones de personas aproximadamente cada año. También se calcula que provoca casi todos los cánceres de cuello de útero, el 90% de los de ano y el 40% de los cánceres de genitales externos. El VPH también provoca cáncer de la cavidad oral y orofaríngeo. Las mujeres pueden prevenir el desarrollo de un cáncer de cuello de útero con la realización del Papanicolaou (PAP). Este examen detecta precozmente células anormales o lesiones en el cuello del útero y permite reducir casi completamente la mortalidad por esa causa. El PAP es gratuito y se realiza en todos los hospitales y centros de salud. Se recomienda a las mujeres realizarlo a partir de los 25 años de edad.

Las personas con infección por VIH tienen un riesgo de padecer ciertos tipos de cáncer considerablemente más alto que las personas del mismo grupo etario sin dicha infección. El VIH debilita el sistema inmunitario y reduce la habilidad del cuerpo para destruir las células cancerosas y para combatir infecciones que pueden resultar en cáncer.

La exposición al sol excesiva o a fuentes artificiales de radiación ultravioleta, como las camas solares, aumentan el riesgo de padecer diferentes tipos de cáncer de piel.

Prevención y detección temprana

La detección temprana es una herramienta indispensable a la hora de prevenir muertes por cáncer, ya que en las fases iniciales de la enfermedad existe un alto potencial de curación (por ejemplo, en cáncer de cuello de útero o de mama).

Recomendaciones para la población en general:

  • Aumentar el consumo de frutas y verduras, legumbres, cereales integrales y frutos secos. Reducir el consumo de grasas de origen animal (fiambres, embutidos, manteca, leche entera) y de ácidos grasos trans (productos de pastelería, snacks y golosinas).
  • Realizar actividad física todos los días, por lo menos 30 minutos.
  • Evitar el consumo excesivo de alcohol.
  • Evitar el tabaco y promover los ambientes 100% libres de humo.
  • Evitar la exposición al sol entre las 10 y las 16, utilizar protectores solares y ropa que proteja la piel (de color claro y liviana). Estas medidas deben extremarse en los grupos más vulnerables: niños menores de 3 años y personas de piel blanca, cabello y ojos claros.

Recomendaciones para las mujeres

  • Niñas de 11 años: para prevenir el cáncer de cuello de útero deben aplicarse la vacuna contra el Virus del Papiloma Humano (VPH), que a partir de su incorporación al Calendario Nacional de Vacunación en el año 2011 está disponible en forma gratuita en todos los centros de salud y hospitales públicos de Argentina.
  • Mujeres a partir de los 25 años: para prevenir el cáncer de cuello de útero, se recomienda la realización de un PAP cada tres años luego de que dos exámenes anuales anteriores hayan tenido un resultado negativo.
  • Mujeres de 50 a 70 años: para detectar tempranamente el cáncer de mama se recomienda la realización de una mamografía cada dos años y un examen de mamas todos los años realizado por un profesional de la salud.
  • Mujeres de 50 años en adelante: para prevenir el cáncer colorrectal, se recomienda la realización de una prueba de sangre oculta en materia fecal.

Recomendaciones para los varones

  • Varones de 50 años en adelante: para prevenir el cáncer colorrectal, se recomienda la realización de una prueba de sangre oculta en materia fecal.
  • Varones de 65 años y más: para prevenir el cáncer de próstata, se recomienda realizar un examen con un profesional de la salud.

Situación del cáncer en Argentina

Incidencia

Argentina se encuentra dentro del rango de países con incidencia de cáncer media-alta; de acuerdo a las estimas realizadas por la Agencia Internacional para la Investigación del Cáncer para el año 2012. Esta estimación corresponde a más de 100.000 casos nuevos de cáncer en ambos sexos por año, con porcentajes similares tanto en hombres como en mujeres. Con estos números, la IARC ha estimado para la Argentina una incidencia en ambos sexos de 217 casos nuevos por año cada 100.000 habitantes.

En magnitud, el volumen más importante de casos estimados corresponde al cáncer de mama con más de 18.700 casos nuevos por año (18% del total y 36% del total de casos en mujeres).

Mortalidad

Las enfermedades no transmisibles (ENT) son en la actualidad la principal causa de mortalidad mundial.

En Argentina, las ENT son responsables de más del 60% del total de las defunciones que se producen anualmente en el país, 20% de las cuales corresponden a tumores. Esto representa aproximadamente 60.000 muertes por año, de las cuales más del 90% se produce en personas mayores de 44 años de edad.

 

Fuente: Ministerio de Salud y Desarrollo Social – Presidencia de la Nación | OMS