Primeros Auxilios
Conocer los procedimientos para los Primeros Auxilios es clave. Los golpes y heridas son situaciones comunes que pueden ocurrir en cualquier momento. Saber cómo actuar puede hacer una gran diferencia.
Te dejamos algunos consejos básicos para que estés siempre preparado.
Ante golpes:
- Evaluá la situación:
Verificá si la persona está consciente y si puede moverse sin dificultad. - Aplicá frío:
Colocá una bolsa de hielo envuelta en un paño sobre el área afectada durante 15-20 minutos para reducir la hinchazón. - Descansá:
Si el golpe es en una extremidad, mantenela elevada para disminuir la inflamación. - Observá:
Si hay dolor intenso, deformidad o incapacidad para mover la parte golpeada, buscá atención médica de inmediato.
Ante heridas:
- Lavá tus manos:
Antes de tocar la herida, asegúrate de tener las manos limpias para evitar infecciones. - Limpiá la herida:
Lavá suavemente con agua y jabón. Si hay objetos incrustados, no los retires, cubrí la herida y buscá ayuda médica. - Aplicá presión:
Usá una gasa o un paño limpio para detener el sangrado. - Cubrí la herida:
Usá una venda estéril para protegerla y cambiarla diariamente o si se moja o ensucia. - Consultá a un médico:
Si la herida es profunda, no deja de sangrar o muestra signos de infección (enrojecimiento, hinchazón, pus), buscá atención médica.
Y recordá que siempre es recomendable realizar un curso de primeros auxilios para estar mejor preparado ante emergencias.